Espacio Directivo

Hace más de 25 años que me dedico a prestar servicios de recursos humanos a empresas y, durante este tiempo, he visto absolutamente de todo. He visto cómo las empresas han evolucionado, cómo la tecnología ha revolucionado nuestras formas de trabajo, y cómo la gestión del talento se ha convertido en un factor crítico para el éxito empresarial. Sin embargo, hay algo que siempre me ha llamado poderosamente la atención: el rechazo casi instintivo que muchas organizaciones en España sienten hacia las evaluaciones 360 grados.

En el ámbito de la selección de talento directivo, las evaluaciones 360º se destacan como una herramienta valiosa, proporcionando una visión completa y detallada de las habilidades de las candidaturas. Esta técnica obtiene feedback desde múltiples ángulos, incluyendo superiores directos, subordinados, clientes y, en algunos casos, personas del entorno personal. Esto posibilita una evaluación rica y diversificada de las competencias del profesional.

Imagina esto: tu director financiero acaba de anunciar su retiro anticipado para irse a cultivar uvas en Francia. O quizás, tu empresa acaba de adquirir otra y se encuentra navegando en las turbulentas aguas de la integración. En situaciones como estas, donde la incertidumbre se siente más densa que un café expreso doble, el interim management no es solo útil, es tu salvavidas empresarial.

En Servitalent aplicamos tres enfoques complementarios para evaluar a las candidaturas en los procesos de selección de nuestros clientes.

Hace unos días lanzamos una encuesta a través del perfil LinkedIn preguntando si en alguna ocasión alguno/a de vosotros/as no había superado el periodo de prueba al incorporarse a una nueva empresa. ¿El resultado? El 19% de las personas que respondieron afirman no haber superado alguna vez el periodo de prueba. 

En el competitivo mundo laboral actual, encontrar el ajuste perfecto entre los candidatos y las oportunidades laborales es crucial para el éxito de cualquier empresa.

El año 2024 se presenta como un periodo desafiante y lleno de oportunidades para las empresas que buscan mantenerse a la vanguardia en un entorno empresarial en constante cambio. La capacidad para adaptarse y evolucionar se ha convertido en una necesidad apremiante, y una de las piezas fundamentales para lograrlo es atraer y retener talento altamente cualificado.

Hoy en día, las empresas se enfrentan a un entorno empresarial cada vez más competitivo y cambiante. Para mantenerse a la vanguardia y lograr el éxito, es crucial contar con un equipo de directivos altamente competentes, eficientes y con capacidad suficiente para la toma de decisiones.

Pero, ¿Cómo podemos asegurarnos de que nuestros directivos estén a la altura de las demandas actuales? La respuesta es simple: a través de un assessment.

La importancia de utilizar herramientas que permitan establecer métricas para medir las competencias de los miembros de un equipo, su adecuación a un determinado puesto de trabajo o su aportación a la estrategia de la empresa, es esencial para incrementar el valor de nuestros equipos de trabajo dentro de nuestras empresas.

La diversidad estratégica es un concepto cada vez más relevante en la dirección y gestión de equipos en las empresas. A medida que el mundo se vuelve más globalizado y las organizaciones se enfrentan a desafíos cada vez más complejos, es fundamental contar con una variedad de perspectivas y enfoques para abordarlos de manera efectiva.