Como ya he comentado en el artículo ¿Qué es una auditoría curricular?, el proceso de auditoría curricular permite a las empresas conocer hasta qué punto los/as...
Desde Ámsterdam con amor
Hacer negocios internacionales puede ser un desafío emocionante, pero también puede ser una tarea difícil si no se maneja adecuadamente la relación entre personas culturalmente muy diferentes. Esta es la máxima bajo la que siempre operamos dentro de Talentor International, la red internacional de headhunters, presente en los 5 continentes, a la cual Servitalent pertenece desde hace ya más de 3 temporadas.
Como cada año, y siempre por estas fechas, nos reunimos durante 2 o 3 días, en una ciudad designada con un año de antelación por los miembros del board, para debatir y compartir experiencias sobre el negocio de la búsqueda y selección de talento. Este año, nos ha tocado disfrutar de la más que notable organización de nuestros partners holandeses. ¡Gracias Independent Recruiters!, y como no podía ser de otra manera, Ámsterdam fue la ciudad elegida.
En este tipo de encuentro, con más de 100 profesionales de múltiples nacionalidades y lenguas nativas diversas, uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta es la comunicación efectiva. Somos muy conscientes de que es fundamental que las partes involucradas en las conversaciones y debates se esfuercen por comunicarse de manera clara y precisa, evitando cualquier malentendido o confrontación verbal. A menudo, las diferencias culturales pueden afectar la forma en que se percibe el lenguaje corporal y la comunicación no verbal, por lo que es importante tener en cuenta estos factores al comunicarse con personas de diferentes culturas.
Otro factor importante, sobre el que hemos aprendido mucho, es el respeto mutuo. Las diferencias culturales pueden llevar a malentendidos y conflictos, por lo que es fundamental tener una actitud abierta y respetuosa hacia las diferencias culturales de los demás. Es importante recordar que lo que puede ser considerado normal en una cultura puede ser ofensivo en otra. Mucha atención con el sentido del humor, las apreciaciones irónicas u otros modos que son habituales en cada uno de los países miembros. En ocasiones, pueden causar el efecto contrario al pretendido.
La adaptabilidad también es clave en los relaciones internacionales. Es importante estar dispuesto a adaptarse a las costumbres y prácticas de otros países. ¡No pasa nada por cenar a la hora de la merienda! Esto es algo que debe reflexionar previamente a la hora de interactuar con un grupo multicultural. La adaptabilidad es un concepto que nos recuerdan siempre antes de iniciar nuestras reuniones con todos nuestros partner. Es la clave del éxito, sin duda.
Por último, la paciencia es esencial en las relaciones internacionales. Llegar a acuerdos puede llevar más tiempo de lo que estamos acostumbrados en nuestra cultura, y es importante ser paciente y no apresurar las cosas. También es importante aceptar que las cosas pueden no salir como se esperaba y estar dispuesto a hacer ajustes y cambios para adaptarse a las necesidades de los demás.
En definitiva, hacer negocios internacionales desde la perspectiva de la relación entre personas culturalmente muy diferentes puede ser un desafío emocionante pero difícil. Sin embargo, si se manejan adecuadamente estos factores comentados, se puede lograr el éxito. No obstante, siempre existen los acelerantes en las relaciones: el ocio con una buena cena, algunas cervezas y animadas conversaciones sobre temas mundanos hacen que las cosas fluyan…y ahí, sin duda, la cultura española suele tener una gran ventaja competitiva.
¡Nos vemos el año que viene en Viena y Varsovia!
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