Decidir qué poner en tu CV no es una tarea sencilla.
Este documento debe ser breve, atractivo y legible. Valiéndote de unas pocas palabras, tienes que expresar tus mayores logros y causar una buena impresión ante el reclutador. Y aquí surge la gran pregunta: ¿Cómo hacer un buen CV?
Aunque no existe una receta mágica, los expertos afirman que hay una serie de cosas que no deben faltar nunca en un currículum. Asimismo, destacan que otros datos pueden ser necesarios o no, según la vacante laboral y el tipo de empresa.
En este artículo descubrirás
qué incluir en tu hoja de vida para destacar entre los demás candidatos y conseguir trabajo.
La información de contacto (nombre, apellido, número telefónico y correo electrónico) constituye la primera sección de todo CV y hasta podría pensarse que es la más sencilla; sin embargo, es muy probable que aún sigas cometiendo errores en este apartado. Así lo explica la experta Tina Nicolai: “Esto puede parecer obvio, pero los candidatos a veces se olvidan de incluir información básica como su dirección de correo electrónico, o lo dejan enterrado en la parte inferior”. Por ello, recuerda colocar estos datos al principio de tu curriculum vitae, en la parte superior. Otra cuestión a evaluar en relación con la información de contacto es cuándo conviene o no incluir un enlace hacia un sitio web propio o una red social profesional, como LinkedIn o Xing. Si el perfil de la red social o la página web están completos, actualizados y muestran lo mejor de tu trayectoria profesional, por supuesto, es un gran punto a favor. De lo contrario, es aconsejable no poner estos enlaces porque podrían restar en lugar de sumar.
Si has investigado sobre cuáles son las partes más importantes de un CV, seguramente has leído muchas veces que el perfil profesional es opcional. Esto parecería quitarle importancia en el proceso de reclutamiento laboral, pero, en realidad, es una de las cosas que no deben faltar en tu currículum si quieres captar la atención del encargado de selección de personal. Tu perfil profesional debe estar ubicado inmediatamente después de la información de contacto. En unas pocas líneas, debes dejar en claro quién eres y por qué eres el candidato ideal para el puesto laboral. Utiliza un título profesional breve y conciso, y destaca tu experiencia, formación y habilidades relevantes para conseguir el empleo en cuestión. A modo de ejemplo, un perfil profesional podría estar redactado de la siguiente manera: “Soy enfermero profesional matriculado, con más de 8 años de experiencia en la atención de adultos mayores. Deseo sumarme a su equipo médico para aportar mi experiencia laboral y continuar profundizando mis competencias en un ámbito de excelencia”. Como puedes observar, este perfil profesional, o extracto, es breve y va al grano. Sin embargo, es suficiente para mencionar el título profesional, resaltar los años de experiencia en un determinado campo y explicar por qué el candidato quiere trabajar en esa empresa.
Al comienzo de la experiencia laboral tienes que mencionar nuevamente un título profesional u oficio, que se relacione con lo solicitado en la descripción del trabajo. Por ejemplo, en lugar de escribir “graduado de la tecnicatura superior universitaria con orientación contable”, es mejor incluir en tu currículum “técnico contable”, tal como lo solicita la oferta laboral. Esto es beneficioso porque es conciso y, a la vez, también es apto para superar los softwares de seguimiento de candidatos. De la misma manera tienes que proceder a citar los cargos que has ocupado, durante cuánto tiempo y cuáles han sido tus funciones. Es posible lograr una redacción completa, sin extenderte demasiado ni aburrir al reclutador. Ahora bien, cuando pensamos en cuáles son las cosas más importantes de tu CV, la experiencia laboral ocupa el primer lugar. Pero, ¿Qué poner en un currículum cuando no tienes experiencia laboral? En estos casos, la formación académica y las habilidades serán las partes de tu hoja de vida con mayor peso. Todo voluntariado o pasantía suma como experiencia laboral cuando recién te has graduado, pero la situación es diferente para quienes ya tienen una trayectoria profesional y deben evitar la información “de relleno”. Si tienes logros, tienes que hacer que resalten en tu CV. Eso sí, siempre teniendo en cuenta las palabras claves de la oferta laboral. El experto en reclutamiento Jeff Hyman explica que el logro de un candidato “podría ser que lo ascendieron cuatro veces en dos años, le asignaron tareas más difíciles, le pidieron que asesorara a otras personas”.
Otra de las cosas más importantes de un currículum es la formación académica. Una vez más, es clave presentar tus estudios de forma estratégica, teniendo en cuenta las palabras claves del anuncio de empleo, por ejemplo, “grado en biología” o “máster en biodiversidad”. Si no tienes experiencia profesional para incluir en tu CV, la formación académica será el punto más fuerte de tu hoja de vida. No obstante, vale recordar que todos los títulos académicos, capacitaciones, seminarios o certificaciones mencionados deben tener una relación estrecha con lo solicitado en la descripción del trabajo.
Las habilidades técnicas se aprenden específicamente para realizar un determinado trabajo, ya sea mediante el estudio o el entrenamiento. Los lenguajes de programación, el manejo de datos numéricos, los software de diseño, la escritura SEO y los idiomas son ejemplos de habilidades “duras” o técnicas que te diferenciarán del resto. Por su parte, las habilidades personales (soft skills, en inglés) se relacionan con las competencias interpersonales y sociales, como la buena comunicación, la creatividad, la capacidad de trabajar en equipo, el liderazgo y el pensamiento crítico. Estas habilidades son determinantes para causar una buena impresión o no. Si no tienes experiencia laboral o eres un trabajador de nivel medio, las habilidades técnicas y personales son la clave para que tu perfil sobresalga. Todas ellas se pueden aprender, pero las habilidades blandas son las que requieren mayor dedicación.
Cuando termines de crear tu curriculum vitae, tienes que corregirlo y editarlo para presentar la mejor versión posible en tu solicitud de empleo. Para ello, corrige la ortografía y la gramática, revisa el diseño y el formato, pero, sobre todo, no olvides comprobar que hayas incluido toda la información necesaria mediante una lista de verificación de tu CV. Información de contacto, perfil profesional, experiencia laboral, formación académica y habilidades son las secciones principales que debes poner en tu currículum. Lee y relee para evitar caer en los errores más comunes, como, por ejemplo, olvidar incluir tu dirección de correo electrónico o pasar por alto las palabras claves de la oferta laboral.
Los expertos brindan muchos consejos acerca de qué poner en tu CV o qué cosas no deben faltar. A lo largo de este artículo, hemos abordado las más importantes. Aprovecha para ponerlas en práctica y sobresalir entre los demás candidatos.
Una cosa más, no olvides verificar que todo está correcto mediante una lista de revisión de CV.