La reciente decisión del Consejo de Ministros de enviar al Congreso de los Diputados el Proyecto de Ley para la reducción de la jornada laboral marca un hito en las relaciones laborales de España. Este cambio, implica una modificación significativa tras más de cuarenta años con la jornada de 40 horas como límite legal. La nueva normativa, que busca establecer la jornada máxima legal en 37,5 horas semanales, introduce elementos clave.
Esta transformación del panorama laboral plantea desafíos y oportunidades para las empresas, especialmente en la atracción y selección de talento en la era de la jornada de 37,5 horas.
En su esencia, la propuesta consiste en modificar el Estatuto de los Trabajadores para establecer la jornada ordinaria máxima en 37,5 horas semanales, calculadas como promedio anual.
Pero hay otros aspectos fundamentales que debemos tener muy presentes:
Aunque el proceso parlamentario puede introducir modificaciones y su duración es incierta, la hoja de ruta planteada apunta a la plena aplicación de la jornada de 37,5 horas a partir del 1 de enero de 2026.
En cuanto a quiénes se verán afectados, se estima que la medida beneficiará directamente a entre 12 y 12,5 millones de asalariados del sector privado en España. De estos, unos 10,5 millones son a tiempo completo y 2 millones a tiempo parcial.
Pero, ¿dónde se sentirá este impacto con más fuerza?
En sectores donde la operatividad depende críticamente de la cobertura horaria continua, como la sanidad, la industria, el retail y la atención al cliente, esta disminución de jornada obligará a una redefinición significativa de los turnos.
La reducción de jornada no es solo un cambio numérico; tiene repercusiones profundas para las personas y las organizaciones:
Bienestar y Conciliación: Un objetivo central es la mejora de la conciliación de la vida laboral, personal y familiar.
Beneficio Salarial Efectivo: Para los trabajadores a tiempo completo, mantener el mismo salario por menos horas trabajadas implica un incremento de su retribución por hora efectivo.
Desafíos organizativos y operacionales: Las empresas deberán reorganizar horarios, turnos de trabajo y procesos productivos.
Costes laborales y productividad: El incremento del coste laboral por hora es una realidad.
Cambio cultural y enfoque a resultados: La medida impulsa un cambio fundamental hacia un enfoque en resultados y desempeño.
Atracción y Retención de Talento: La jornada reducida puede ser un factor diferencial en la atracción y retención de talento.
Impacto en la negociación colectiva: La ley influye en las futuras negociaciones colectivas.
Este escenario nos muestra que la reducción de jornada requiere a las empresas repensar sus modelos de negocio y explorar nuevas formas de eficiencia operativa.
En este nuevo escenario, la búsqueda y selección de talento adquiere una relevancia aún mayor. Las empresas necesitan identificar profesionales que no solo se ajusten a los requisitos técnicos del puesto, sino que también demuestren adaptabilidad, capacidad de gestión del tiempo, orientación a resultados y habilidades para trabajar eficazmente en un entorno flexible.
Servitalent, con su servicio de Talent Search, se posiciona como un aliado estratégico para las empresas en este proceso. Ayudamos a identificar y atraer al talento más adecuado para los nuevos desafíos del mercado laboral, teniendo en cuenta las competencias y habilidades necesarias para prosperar en el contexto de la jornada de 37,5 horas.